El porqué del nuevo Real Madrid (3ª Parte)

5.- REUBICACIÓN DE RAMOS Y ADELANTAMIENTO DE LA LÍNEA DE PRESIÓN

Repasando el artículo unas cuantas líneas atrás, recordamos el momento en el que Mourinho decide dar un paso adelante en la transformación del juego de su equipo. Quizás la disputa de los clásicos de la temporada pasada constituyen el punto de inflexión en lo que consideraba Mourinho que le faltaba al equipo para ser dominador del partido y poder plantar cara al Barça. La intensidad, tanto en el juego como en la presión son los dos aspectos en los que el entrenador ha hecho hincapié desde la pretemporada y que se pudo apreciar en la disputa de la Supercopa de España. Para ello colocó desde un principio a Fabio Coentrao en el centro del campo por su despliegue físico fundamentalmente. Pero el experimento se fue diluyendo poco a poco. Se ganaba en intensidad, eso sí, pero a costa de un desorden que sacaba de quicio a algunos de los futbolistas del equipo, casos de Alonso u Özil, que no encontraban su espacio dentro del terreno de juego. Se perdieron 5 puntos en campos asequibles como Levante y Racing. Pero desde el partido del Sardinero el juego del equipo experimenta una transformación que ahoga a sus rivales y que le ha hecho ser el candidato de siempre a ganar todos los títulos que dispute. ¿Qué ha sucedido desde entonces? ¿A qué se debe esta rápida transformación?

Metiéndome de lleno en análisis táctico puro llegamos a este apartado, donde Sergio Ramos juega un papel fundamental en el estilo de juego de este nuevo Real Madrid.

Las lesiones en el centro de la zaga han hecho que el sevillano se haya tenido que reconvertir a la posición de central, algo que ha dotado al conjunto blanco de un empaque y un poderío defensivo que no lograba desde hace mucho tiempo. O puede que Mourinho ya tuviera pensado hace tiempo colocar al de Camas por el centro, tan sólo recordar el empeño del portugués en fichar a Maicon. Sea de una forma u otra, el hecho de que Ramos juegue en el centro formando pareja con Pepe ha ayudado mucho a subir la línea de presión del equipo una cantidad de metros importante, debido al poder de anticipación, velocidad y contundencia de ambos jugadores y que muchos jugadores importantes del equipo agradecen.

Veamos la influencia de Sergio en sus compañeros de equipo y en el juego colectivo:

Primero destacar que jugando de lateral derecho, donde ha sido campeón mundial y un jugador muy reconocido en esa posición, el sevillano se desgasta en exceso dado que los interiores de ese lado tienen tendencia a meterse hacia dentro (Di María u Özil) dejándole todo el carril para él. Esto hace que muchas veces se vea descolocado y superado en labores defensivas afectando todo el engranaje defensivo del equipo. Con Arbeloa en esa posición (quizás pronto con Altintop), un jugador más táctico y menos impulsivo, el juego defensivo del equipo mejora considerablemente, mientras que el ofensivo apenas se ve degradado, como se demostró con sus dos asistencias en el partido ante Osasuna.

Por el contrario, jugando por el centro, Ramos siempre puede ver el desarrollo del juego de frente sin un desgaste importante y empleando su espectacular poderío físico en la anticipación, tanto en el juego aéreo como a ras de césped, para salir a la presión y a la recuperación de balón adelantando el bloque defensivo del equipo considerablemente. Ya no tenemos que ver a un Pepe intentando ser el apagafuegos de la temporada pasada, donde llegaba muchas veces al límite, lo que le valió más de una expulsión en partidos importantes. Con Sergio al lado, el central portugués juega con mucha más suficiencia, alternando la salida del balón con el sevillano, algo que dota al equipo de una salida más fluída de balón que se nota en los porcentajes de posesión del conjunto.

Siguiendo con los jugadores de la zaga, la influencia de Ramos respecto a Marcelo es de suma importancia, ya que al jugar de central por su lado, éste se ve mucho más liberado en sus tareas defensivas, algo que agradece él y, por tanto el equipo, ya que su juego ofensivo es vital en situaciones donde los rivales esperan atrincherados en su campo. Además el hecho de que Sergio haya jugado tanto tiempo en banda le quita el miedo a salir a ella, algo que le da pánico a la mayoría de jugadores de esa posición.

Muchas veces veíamos a jugadores del equipo rival olvidarse del balón para encimar a Xabi Alonso haciendo que tuviera que bajar mucho a recibir para iniciar el juego, y así debilitar la fluidez en salida de balón del conjunto blanco, lo que hacía que en numerosas ocasiones viéramos balones largos desde la defensa buscando la velocidad de Cristiano o Di María haciendo un fútbol muy previsible para ser contrarrestado por el contrario. Ahora, como ya he resaltado antes, entre Pepe y Ramos la salida de balón no tiene que pasar necesariamente por Alonso, sino que éste puede recibir mucho más arriba el balón en segundas jugadas, mucho más difíciles de contrarrestar después de que el rival haya sido movido de su posición inicial. De esta manera, la precisión en los envíos de Xabi es mucho mayor, ya que las distancias son menores, dejando en muchas ocasiones a sus compañeros en posiciónes de ataque inmejorables y moviendo con mucha más fluidez el balón de un lado a otro del terreno de juego con sus exquisitas diagonales.

El poderío físico de Lass y, sobre todo Khedira, se ve agrandado al estar mucho más adelantado el equipo, ya que tienen menos recorrido que hacer para llegar a la presión tras despejes o malos pases del contrario debido a la presión de sus compañeros de ataque. Además pueden llegar con más presencia al área rival, lo que Mourinho define como jugadores “Box to Box”

De la misma manera sucede con los jugadores de ataque. Al presionar la salida del balón casi en área rival, éstos tienen muchos menos metros que recorrer cuando su equipo recupera el balón para plantarse en situaciones de uno contra uno o de disparo. El año pasado jugadores tachados de individualistas como Cristiano o Di María, esperaban la salida a la contra para explotar sus cualidades, teniendo que acabar la jugada de manera personal en muchas ocasiones. O esperar los balones largos lanzados desde su defensa para tener opciones de hacer jugada individual. Ahora ambos no sólo aportan regate y gol, sino que son dos de los mejores asistentes de la liga, y todo debido a que tienen muchas más opciones en el rectángulo de juego donde demostrar todas sus calidades futbolísticas, algo que antes apenas tenían ocasión de hacer.

Por otro lado, el hecho de que el Real Madrid de este año juegue mucho más cerca del área rival hace que haya muchas más situaciones de jugadas de estrategia a favor, algo en el que el Madrid es muy superior a la mayoría de sus rivales por físico y calidad y que está quedando reflejado en los números de este año en este tipo de jugadas. Cristiano, Kaká. Özil, Xabi y Sahin son algunos de los mejores lanzadores de estrategia del fútbol europeo. A esto hay que añadir el juego aéreo de Ronaldo, Pepe o Sergio Ramos entre otros.

La colocación de Ramos en el centro de la zaga junto a Pepe ha sido clave en la mejora del equipo

CONCLUSIONES FINALES

En las últimas jornadas estamos viendo que el Real Madrid ya no es un equipo basado en la pegada, el contragolpe y en la calidad individual de sus futbolistas, características que no sólo no han perdido sino que han perfeccionado. Ahora es un bloque, un equipo sólido en el que las individualidades tiene su sitio, pero siempre al servicio del colectivo.

Poco a poco el conjunto blanco está recuperando el espíritu de antaño, su seña de identidad, esa seña de cada club que tan arraigada tiene el Barcelona y que les hace inconfundibles haya por donde jueguen.

Mourinho está logrando un equilibrio casi perfecto en el conjunto blanco. Un equilibrio difícil de alcanzar como es que todos se sientan importantes y repartir minutos entre todas las estrellas del vestuario. Algo que siempre persiguen los entrenadores de fútbol y en lo que casi todos han fracasado a la larga. Y quizás todo esto sea posible porque él mismo se siente tan estrella como ellos. Siempre ha habido titulares y suplentes en los grandes clubes. Aquí radica la habilidad –o la autoridad- del entrenador para mantener “enchufados” a todos para cuando llegue su momento.

El Madrid hoy es una máquina de hacer fútbol en clara progresión. Y el Barcelona es una máquina de ganar partidos ya contrastada. El Real Madrid está mejorando a pasos agigantados muchas cosas. Es más equipo. Y tiene una plantilla más completa que la del Barça. Pero hay algo en lo que el Barcelona es aún superior: el Barça está más acostumbrado a jugar los partidos importantes. El Madrid tiene más hambre de títulos, el Barça parece acomodarse, pero los jugadores del Barcelona tienen esta ventaja.

Sólo llevamos 3 meses de competición, pero nunca el Real ha estado más cerca del Barcelona en las últimas fechas. Y esto nos encamina a un pulso entre ambos para llevarse los 3 títulos a casa. El próximo clásico de diciembre empezará a despejar dudas…